Como agua para chocolate (Laura Esquivel)

Título: Como agua para chocolate.

Título original: Como agua para chocolate.

Autor/a: Laura Esquivel.

Saga: ---

Editorial: Punto de lectura. 

Traducción: ---

Año: 2014 (1989).

Páginas: 264.

ISBN: 9788466327954.

Precio: 7.99€.

¿Dónde puedo conseguirlo?: Punto de lectura

Sinopsis: No siempre tenemos a mano los ingredientes de la felicidad. Tita lo había aprendido desde pequeña, cuando crecía en la cocina con Nacha y se le negaba toda posibilidad de vida propia desde su nacimiento. Pero también aprendió que los ingredientes no son lo más importante para cocinar un buen plato, sino todo el amor con que seas capaz de hacerlo. Sus platos no sólo tenían el poder de deslumbrar pos sus sabores y texturas. Su tristeza, su alegría, su deseo o su dolor a la hora de prepararlos se contagiaban irremediablemente a todo aquel que los probaba.




Punto de lectura se ha convertido en una de mis editoriales favoritas. Ya no sólo por el catálogo tan amplio que tienen, la variedad y buen gusto, sino por sus precios y sus ediciones. Todo lo que he recibido de ellos me ha parecido estupendo, manejable y realmente cómodo. Por no decir que han resultado unas lecturas magníficas. Nadie me puede decir que con ellos no esté contenta, de eso estoy segura.

El caso es que yo ya había leído este libro allá por el año noventa y algo, querido lector. ¿Te acuerdas de Ale, mi prima? Sí, la que tenía unos padres con una biblioteca propia chulísima. Pues fue ella la que, otra vez, me dio a conocer uno de los libros de mi vida. Con apenas diez años leí a Tita, a Mamá Elena, a Pedro y Rosaura. Y me enamoré. Poco después, mientras cursaba la E.S.O., lo elegí como lectura voluntaria y así ganarme unos puntos en la calificación final. Hoy, gracias a Punto de lectura, lo vuelvo a disfrutar tan gratamente como siempre.

Doce capítulos. O doce recetas. Eso es lo que tarda Laura Esquivel en contarnos la vida de Tita, una muchacha joven y encantadora a la que le encanta cocinar. Su desdicha más grande es la horrible tradición que pesa en su familia: la más joven de las hermanas ha de cuidar de su madre hasta que ésta fallezca. Esto significa que no puede casarse, ni tener hijos, ni prácticamente tener vida mientras su progenitora respira. No sería para tanto si Tita no se hubiera colado tan perdidamente por Pedro, el amor de su vida, que termina tomando una decisión desesperada con el mero fin de estar cerca de ella. A la vez que nos explican cómo hacer cierto platillo, nos cuentan la vida de Tita, con sus dichas y desdichas, todas por igual.

Esquivel trabaja en esta obra suya con algo que ya veníamos observando con el grandísimo García Márquez en su joya literaria Cien años de soledad: el realismo mágico. Yo por aquél entonces no tenía ni idea, claro. En esos días simplemente me parecía un libro precioso y encantador. Hoy me parece una hermosura indiscutible. Porque con sus mecánicas de ensueño, Laura nos inserta las cosas más desvariadas en una vida cotidiana llena de personajes muy distintos que encajan entre ellos con asombrosa facilidad. Odiarás a unos con la facilidad que amarás a otros. Todo envuelto, como es lo típico del movimiento, con el trasfondo de la guerra y los problemas políticos y sociales de la Sudamérica de entonces. Sufrirás, reirás y disfrutarás de veras con esta novela, que, además de corta, es impresionantemente asequible.

Así que una cosa te digo, querido lector: estás tardando en ir a comprarla. De veras te recomiendo la edición que yo he leído, que además de manejable es encantadora, muy adecuada y con una decoración magnífica. Y, por si fuera poco, apto para todos los públicos. Da igual que tengas ocho años que ochenta: este libro no te dejará indiferente en ninguna de sus formas.

Muchas gracias por el ejemplar a Punto de Lectura